Per fi tenim els quatre relats finalistes seleccionats per la Comissió de Dinamització de la Lectura en el mes de març. Estem molt satisfets per la vostra acollida i us comuniquem que moltes de les 63 històries que hem rebut són intrigants i sorprenents. Gràcies per participar-hi, gràcies, gràcies!
A FLOR DE PIEL
Siempre supe que nunca había estado allí antes, en
esa ciudad solo quedaba desesperación y agonía. Casas destrozadas por el impacto
de las desmedidas bombas, cuerpos putrefactos esparcidos por las lúgubres
calles. La locura y el miedo se apoderaron de las almas restantes. Mi cuerpo
empezó a temblar. A lo lejos, se escuchaban los sollozos de lo que parecía una
niña indefensa, contemplando lo que la guerra le había arrebatado. Una
sensación de miedo, y terror corrompía mis sentidos. De repente, todo se acabó,
las luces se encendieron, los créditos aparecieron y la gente se levantó de sus
butacas.
EL EJÉRCITO
Siempre supe que no
había estado allí antes, me equivocaba. Ese lugar me resultaba familiar. Hice
memoria y pude recordar mi infancia en ese sitio. Pero estaba cambiado, antes
era un bonito prado, en cambio ahora era un duro campo de batalla.
A lo lejos pude
apreciar un ejército de miles de soldados, rápidos y fuertes, acercándose a un
gran enemigo. Esa bestia les triplicaba en tamaño, pero por sorprendente que
parezca los soldados lograron derrotarlo. Tan rápido como llegaron, las
hormigas se alejaron con su botín. Un escarabajo.
LOS ANTIGUOS
RECUERDOS Y UN NUEVO EMPEZAR
Siempre supe que no
había estado allí antes, había visto ya muchos lugares parecidos y desde
diferentes perspectivas, pero nunca como aquella. Gracias a mi compañero
retengo cada uno de esos antiguos y bonitos recuerdos en mi memoria.
Él no podía
recordar sin mí, lo he visto crecer y madurar, pero últimamente es otro quien
ocupa mi lugar. Por fin volvía a servirle como antes. Aparcó su moderno
teléfono para cogerme, enfocarme y fotografiar aquel sitio espléndido, como
solíamos hacer en los viejos tiempos.
MI HORA
Siempre supe que no
había estado ahí antes, pero me resultaba excitante. Ya había observado la
situación anteriormente junto a mis compañeras, pero siempre detrás del
cristal.
Era mi momento. Me
veía reluciente, y notaba un calor que inundaba todo mi ser. La realeza estaba
a la espera de mi llegada.
Las cinco en punto.
Mi hora. Me acompañó una criada y me dejó a solas con esa elegante mujer. Ella
me rozaba el brazo y sus labios acariciaban mis paredes.
Nunca imaginé que
la reina iba a elegir a una taza como yo para beber su té.
Ara ajuda'ns a triar la millor història pitjant l'enllaç de la fotografia. Vota i decideix!
Comentaris
Publica un comentari